viernes, marzo 23, 2007

Los quemados murieron de ardor

Pues estaba bien relajadito en mi trabajo porque he reducido el tiempo automatizando algunas cosas, simplificando algunos procedimientos y cosas así.

Sin embargo cualquier trabajo siempre existe el tipo wanna be, aquél que creé que llegará a un alto puesto siendo bien barbero con la gente de arriba; aquí no es la excepción, mi "jefe directo" (solo él cree que es mi jefe) aceptó llevar él muchas de las tareas que se hacían en otra área cuando un guey de esa otra área renunció, él jura que ésto lo llevará al siguiente puesto. Hasta el día de hoy a mí me valia madre, pues era su bronca si el quería hacer más y más cosas con tal de ser un obediente empleado que llegaría a las grandes ligas.

Pero ya quiere repartir, y como se dice en México "Si no te cabe, no repartas", y es que aquí al señor le entró el enojo de que ve que yo tengo mucho más tiempo libre que él, pero insisto, no es mi culpa que habiendo estudiado sistemas ambos solo yo lo ocupe en mi beneficio. Si él lleva su administración de tareas en Outlook y aparte utiliza una agenda de papel, pues yo que culpa tengo de que sea una verguenza para el gremio informático, no quieren automatizar su propia chamba, hacen sistemas defectuosos, no revisan sus pendientes y se enojan porque uno va al día y le sobra tiempo.

En fin, esto fue solo un momento de catarsis porque a partir del lunes seguramente me dejaran tanta chamba como sea posible para que no pueda salir a mi hora. Ya estaré relatando el resultado final.

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